miércoles, marzo 26, 2014

Ayer me compré una engrapadora

Ayer  me compré una engrapadora

Hace tiempo que tenía un deseo... comprarme una engrapadora, jajaja ¡que gran deseo!, sí eso era todo lo que quería, una engrapadora, bueno, ayer me la compré, me compré una engrapadora, y en el mismo instante comenzó la tarea, hay que engraparlo toooodo; los cuadros en la paredes desnuda de mi casita vieja, los pedazos sueltos de tapiz de mis sillones, el mantel tejido que se corre de mi mesita porta macetero, los afiches, los letreros, las sillas, los...., las... todo había que engraparlo todo, antes que muriera mi engrapadora, por qué será que en cuanto la compré pensé: se va a descomponer pronto, jajaja ha de ser porque en mi colegio, perdón en mi ex colegio la engrapadora siempre estaba mala, en fin total ...no es tan malita mi engrapadora, bueno no es la mejor del mercado, no es la más costosa,  por Dios que hay variedad de engrapadoras, pero tampoco es la más barata, es solo mi engrapadora.
Después de tapizar lo que encontré, me senté en el suelo con mi engrapadora en la mano y bueno ahí empezó mi gran reflexión ... debería haber mas engrapadoras, engrapadoras para el alma así habría podido engrapar a mi vida a esa amiga que se alejó dejando un vacío terrible en mi corazón, habría podido engrapar en mi alma esa lealtad que un día me juraron y que el tiempo diluyó, habría engrapado la inocencia de mi hijo que un día abruptamente se fue, habría engrapado mi niñez en la casa de mis padres   en mi Iquique amado, estaría ahí engrapada en las paredes de  mi casa donde susurra el mar; podría también engrapar mi corazón para que no se colara el frió del rechazo o de la despedida, y que tal si engrapara los labios puerta de salida de alguna lengua viperina (como dice mi papito). Creo que el mundo serīa mejor con más engrapadoras, por lo pronto yo...ayer compre mi engrapadora.
Brexxy

miércoles, marzo 12, 2014

Conseguí una casa vieja

Buscando una vida nueva, conseguí una casa vieja; o más bien, la casa me encontró a mi, tal cual como un día la poesía me había encontrado, la casa estaba desnuda, en ruinas,  mostrando débilmente, o estoicamente  su pasado, tal vez más digno o al menos más señorial, sentí que su energía me hablaba, había conseguido una casa vieja para darle vida a un sueño nuevo, yo siempre  había buscado una casa nueva para instalar mi sueño, así casi sin esfuerzo, llegar cargando mi sueño e instalarlo en una casa nueva, pero conseguí una casa vieja, y me di a la tarea arreglarla sin que perdiera su maravillosa esencia de casa vieja, comencé a vestir su desnudez, a maquillar sus paredes de adobe, sus pisos de  tablas añosas. La casa ya se ve digna en su vejez, aún le falta ropaje, sus arreglos han sido precarios, pero igual se alza majestuosa en su "cuadra", se destaca entre las demás.  Y ahí entre sudor de cansancio, lagrimas de impotencia, angustia de soledad, y suspiros de esperanza, ahí entre las tablas añejas, el olor a cera, que abrillantó sus pisos de pino del siglo pasado, allí bajo las claraboyas generosas, de sus techos altos, que invitan a los rayos del sol a bajar, allí entre los ruidos de las maderas que crujen, allí en la casa vieja se instaló mi sueño nuevo, se apoderó de  la casa como la casa se apoderó de mí, y ahora este sueño va  dandole cobijo a otros sueños porque todos ellos pueden coexistir,  porque hay un lugar para todos... porque conseguí una casa vieja.
Brexxy

miércoles, febrero 26, 2014

Los libros

Pensé que el hecho de tener en mi Ipad una riquísima biblioteca me evitaría viajar cargada de libros, a menudo voy leyendo más de uno, Obviamente lo primero que hice al adquirir hace unos meses este tan deseado aparatito y antes de pagarlo completamente,  fue bajar el siempre bien ponderado Ibook, y ahí comenzó la frenética tarea de bajar libros y lo que es mejor, GRATIS, algo no menor para los chilenos que somos lectores compulsivos, ya saben por esto del IVA de los libros... bueno pero ese es otro tema, le hablaba de  mi súper complentísima biblioteca y toda esa maravillosa colección en este aparatito que pesa que sé yo... 500 grs. bueno no lo se, lo que si sé es que en este rapidísimo viaje a Iquique, tomé mi Ipad y salí tan segura que era todo lo que necesitaba, bueno antes de abordar el auto adivinen, me devolví a buscar mi libro que estaba sobre el velador Roberto Bolaño debía acompañarme en papel, no hay caso no se vivir sin literatura pero uno de los ingredientes principales de  este alimento es el olor a papel... ahora voy en viaje escribiendo esto, con el libro seguro en mi bolso de mano y pensando en ese libro comprado en Cuba a gusto de mi Tamara, que me espera en Iquique, no hay de otra me regresaré con mi Ipad de medio kilo, con su biblioteca abultada, y mis tesoros, que pesan tres kilos, en mi bolso de mano, mis libros de verdad los de papel.